domingo, 29 de noviembre de 2015

Sobre el Perfil de Agua Potable Rural

OBJECIONES A LA FORMULACIÓN A PERFILES DE AGUA POTABLE RURALES (Aplicables a otros tipos de Perfiles)

De la exposición del Ing. Sanitario J. G. del 12 y 13 de noviembre del 2015 en la Sede del ConectaMEF de Trujillo (Av. César Vallejo 1000), se tiene las siguientes objeciones para su mejoramiento:

En principio para obtener dos puntos del plano cartesiano (con ejes precio y cantidad) que permitan graficar una línea de demanda de agua potable, Ud. mencionó tres formas:
1. Lo que actualmente se paga y consume por agua potable mediante otros mecanismos (venta de agua por cisternas por ejemplo).
2. Información de micromedición de entidades que ya prestan el servicio (histórico)
3. Medidor testigo, cuya validez sería recién al tercer o cuarto mes

Expresó en su exposición que un punto de la línea de demanda podría hallarse con el método 1 y otro punto de la línea de demanda con el método 3 y con ello se concluiría la construcción de esta gráfica de demanda y podrían hallarse los beneficios al rebajarse el precio y liberarse recursos.

Mi OBJECIÓN a esta forma de hallar la gráfica de la demanda es por lo siguiente:

La demanda de una localidad involucra un número finito de usuarios que tiene CADA UNO una demanda personal y que sumadas esas demandas individuales nos da una demanda total de la localidad donde se requiere intervenir. Por ello, cuando aplicamos métodos distintos que corresponden a usuarios muy diferentes (usuario no conectado y usuario que ya cuenta con el servicio) no se está calculando adecuadamente la demanda. Supongamos que en esta localidad hay unos mil demandantes (entre conectados y no conectados), pero para simplificar sólo dibujamos a 8, eso implica ocho líneas de demandas individuales: d1, d2, d3, d4,… d8.
Gráficamente: 



DPROM: Demanda por agua potable representativa “realmente” de una determinada localidad.

Son líneas de distinta magnitud (algunos más a la derecha y otros más a la izquierda dependiendo la referencia que se tome) porque los usuarios tienen –principalmente- distinto ingreso (realidad insoslayable) y además poseen distinta inclinación (pendiente) por tener diferente elasticidad de la demanda (sensibilidad de la cantidad demandada ante cambio en el precio) por ser usuarios de distinta características (ingresos, prioridades de gasto, etc.).

1. Primer Caso: Mediciones de personas distintas
Si de este gráfico tomamos los puntos correspondientes a individuos muy distintos (no conectados y usuarios habituales) y por ende tenemos demandas muy distintas como se muestra:


2. Segundo Caso: Mediciones de un mismo demandante no representativo


En los dos casos anteriores se Genera una demanda distorsionada que no corresponde a la realidad y por ende calculándose más adelante beneficios que no son ciertos.
Quizá el hecho de que los PIP de Saneamiento sean de tipo predominantemente “ingenieril” hace que este cálculo económico sea menospreciado, si fuese a la inversa, es decir, predominantemente económico, mediríamos con toda rigurosidad la demanda y cuando toque hacer el reservorio o la ubicación de la captación (en caso de servicio de agua potable rural) nos basaríamos en un reservorio de otra localidad multiplicando por un factor de corrección ¿Qué tal? Suena blasfemo para los ingenieros sanitarios, ese mismo escozor les da a los economistas cuando se calcula en forma inapropiada la demanda.
Hay que tener en cuenta que –al tratarse de un perfil- no se busca la perfección, pero en este caso, será la única ocasión en todo el proyecto, en el cual se medirá la DEMANDA mientras que el diseño de los planos y cálculos para la infraestructura se volverán a hacer –mucho más rigorosas que en el perfil-, en el Expediente Técnico.
Las mediciones más precisas de la Demanda por agua potable, implica recolectar más datos, lo que finalmente desemboca en un aumento de costos. Estos datos no tienen por qué ser tipo censo (entrevista a todos y cada uno), para eso están las técnicas estadísticas (muestreo) que evitarían el aumento desmedido de los costos. Por otro lado, está el problema de la falta de conocimiento -de la mayoría de los proyectistas- para calcular econométricamente una ecuación de la demanda por agua potable que si sea representativa de una localidad.
Estas dificultades no implica que deba mantenerse la situación inadecuada de cálculo de este componente económico -que permitirá establecer la viabilidad del proyecto-, más bien se debe buscar una solución intermedia (entre aumento de costos y cálculo muy preciso).

PROPUESTA.-
Teniendo en cuenta que para mejorar esta medición de la Demanda se requieren dos etapas, a saber:
- Mayor recolección de datos con un muestreo.
- Procesamiento econométrico de la información para obtener la ecuación de la demanda.

Una primera idea es que la mayor recolección de datos no se puede evitar, además para establecer el número preciso de muestras utilizando las técnicas estadísticas no deberían ser de gran dificultad, incluso para facilitar y estandarizar este proceso, podría establecerse parámetros en el formato SNIP 09 de acuerdo al número de habitantes de una localidad, lo cual libraría de dificultades a un consultor. En este primer paso no se puede evitar un aumento de costos.
En cuanto al procesamiento de la información estadística se podría trabajar con un aplicativo generado en Excel (estoy viendo la forma) para sólo introducir los datos y pueda obtenerse el cálculo econométrico sin grandes dificultades, esto, si es estandarizado no generaría incremento de costos para el consultor y por ende del perfil.

PROPUESTA AUDAZ.-
La dificultad planteada aquí se podría solucionar con mayor eficacia con un cambio de paradigma: que el jefe del proyecto (a nivel perfil) sea un Economista (obviamente con estudios de proyectos de inversión pública) de tal forma que la sustentación y viabilidad sean más cuidadosamente analizadas y aprobadas.
Esto lo sostengo porque, en mi caso, observo que TODOS los perfiles los firman Ingenieros civiles (y elaboran de seguro), quienes poca o ninguna importancia otorgan a los cálculos de Demanda y la sustentación del perfil, su especialidad, diseño de planos y cuantificación de costos es su prioridad, pero insisto esto se podría perfeccionar en el Expediente Técnico, la justificación y viabilidad del perfil se está descuidando en estos casos. Además creo que esto se repite constantemente en las localidades rurales de la Sierra y Selva de nuestro país, se prioriza la construcción si o si (estilo ingenieril) antes que la optimización (análisis de la oferta para asignar eficientemente los recursos escasos del Estado) que lo haría el economista.
Por ello mi planteamiento es que en el PERFIL se priorice la justificación y sustento del porqué debe darse el proyecto (aún más) y para la parte de planos y metrados se programe un software de ingeniería estandarizado -según sea las dimensiones de la infraestructura física (reservorio, distancia de captación, etc.)- en el cual se introduzcan datos y se arrojen los cotos correspondientes. Obviamente, como bien se sabe, cada lugar es distinto e implica costos diferentes, no obstante este programa informático debe tener opciones para añadir situaciones especiales (compra del terreno, costos diversos, etc.), de lo que se trata es hallar el aproximado más cercano, con el perfeccionamiento del Expediente Técnico (full ingenieril) se corregirían errores (cómo actualmente se hace). Aunque, no se puede olvidad, son necesarios también los trabajos topográficos en el perfil, hay estudio de suelos de todo un distrito que ya existe en algunos lugares.
Un beneficio adicional de esta propuesta audaz es que el economista a cargo del proyecto podrá centrarse, obviamente en la viabilidad, pero ESPECÍFICAMENTE EN LA OPTIMIZACIÓN, pudiendo generar grandes ahorros de dinero al Estado si es que con una oferta optimizada no se lleva a cabo el proyecto pero se soluciona gran parte de la necesidad de una localidad, incluso si se lograse atender parte de la demanda insatisfecha que implique una postergación ya es un gran beneficio, esto porque actualmente existe la “cultura del éxito” sólo cuando el perfil es declarado viable implicando ello la ejecución de una obra.

SEGUNDA OPCIÓN DE LA PROPUESTA AUDAZ.-
La otra posibilidad es que se separe en dos el perfil, justificación y sustentación a cargo de un economista y recién cuando se dé la aprobación, se pasaría a la parte ingenieril. No necesariamente se daría un aumento del costo del perfil, ya que podría rebajarse los honorarios de cada consultoría, bueno es una posibilidad con dificultades que puede perfeccionarse.

Por: Econ. Albino Zárate Añanca.